domingo, 14 de septiembre de 2014

Torre solar



Una torre solar es una alternativa a gran escala de los paneles solares para obtener electricidad a partir del Sol. Su forma es la de una torre donde está el generador de energía y alrededor paneles que reflejan la luz.
Comparado con otras energías, las centrales de torre solar ocupan un gran terreno, ya que para que sea rentable, la torre ha de medir 1 km de alto.
Su funcionamiento es simple, alrededor de la torre se encuentra lo denominad invernadero, una extensión de varios kilómetros cuadrados de cristal con paneles bajo él que reflejan la luz de tal forma que rebote en el cristal y permanezca la luz más tiempo dentro calentando el aire del invernadero. Como el aire caliente sube, crea una corriente de aire por toda la superficie que absorbe aire frío por los extremos del invernadero a modo de aspiradora que mueven las turbinas que hay en la base de la torre. En otras palabras, el aire entra frío por los laterales, se calienta y sale por la torre.
Cuanto mayor sea el tamaño de la torre y del invernadero, mayor cantidad de aire mueve y mayor es la energía generada.
Fue diseñada en 1903 por un coronel español, Isidoro Cabanyes, pero los primeros en idear una central a base de torre solar fueron los alemanes.
La primera torre solar fue construida en 1982 en territorio español pero con dinero alemán. Era una prueba de su funcionamiento a escala, ya que como ya se indicó, para ser eficiente debería medir un kilómetro de alto. Esta medía 195 metros, tenía un diámetro de 10 metros y el invernadero ocupaba 46 kilómetros cuadrados.
En 2006, Jonás Villarrubia patenta en España y Europa un diseño de torre solar que reduciría drásticamente el tamaño de la misma a 90 metros de altura y que el factor que condiciona la generación de energía es el número de espejos a su alrededor. Este nuevo diseño se basa en la idea de, en vez de calentar una extensa zona de terreno, calentar directamente la torre en la cual hay un motor que transformaría el calor en electricidad. Gracias a la diferencia de temperatura entre la zona calentada y un extremo frío, se expandiría y contraería una válvula de forma parecida al motor de combustión. Este motor haría girar una turbina que movería el aire y este unas turbinas para generar la electricidad. La razón por la cual este motor no es el que genera la electricidad es la de mantener, en caso de que se nuble o haya momentos de menor intensidad lumínica, un flujo de aire gracias a la energía residual tanto de la turbina como del flujo de viento que seguiría creando movimiento.
Además de la ventaja de que es una energía limpia, se puede utilizar para varias cosas a la vez. Por ejemplo, gran parte de la zona de invernadero podría ser utilizada para el cultivo de plantas y el flujo de aire caliente podría ser utilizado para destilar agua. Las propias plantas ayudarían a la generación de calor, por lo que ayudaría a generar más electricidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario